Y AL VIVIR SUEÑA

Y AL VIVIR, SUEÑA

El alma rota y cuatro paredes,

el recuerdo, como humo

haciendo cabriolas en el aire

y en el corazón un nudo,

un nudo que quieres desatarte,

buscas agarrarte a un espejo

que dulcifique tu imagen

pero es inútil, o están lejos

o no acaban de gustarte.

Ábrele la ventana a la noche

que espera ahí fuera,

está ansiosa por poseerte,

hasta los árboles se desnudan

y sus hojas forman un manto,

esperando en el suelo

las caricias de tus pasos.

Anda, confúndete con la vida,

entorna tus ojos de fiera

y mira arriba, al cielo,

entre tantas estrellas

seguro habrá algún lucero

que, prendado de tu nostalgia

te regalará un te quiero.